“En la medida en que vamos avanzando en el prajnaparamita, vemos que él es devorador de demonios, o sea, todos esos aspectos que parecen externos comienzan a ser vistos como internos, coemergentes.
Vamos a comenzar trabajando con las personas mismas, tangibles. Miramos uno a otro y decimos “No es que el otro sea irritante, soy yo quien me irrito”. No es que él sea irritante, está perturbado. Ahora, si él está perturbado, ¿por qué a mí me va a importar la perturbación? Yo no me voy a perturbar. Yo me mantengo no perturbado y lo ayudo a salir de la perturbación.
Nosotros vamos a comenzar a trabajar de ese modo. Pero yo podría, por ejemplo, pensar así: “Tengo mucho sensibilidad. Miro a otro y veo la energía que produce sobre mí, entonces ¡vade retro!”. Si vemos de este modo, en ese momento prendemos al otro en aquello y nos prendemos en la sensibilidad de la acción del otro. Parecemos súper expertos porque vimos el efecto que el otro produce sobre nosotros. Si digo “¡vade retro!”, consolido toda la situación. Tan pronto él aparece o surge una foto, un recuerdo o alguien que lo menciona, digo: “¡es él volviendo!”.
Por otro lado, si miramos al otro con compasión, viendo que está perturbado por alguna cosa, no consolido al ser ni consolido la relación ni la perturbación. Yo simplemente no me voy a perturbar. Eso corresponde al cuerpo translúcido, al cuerpo de Guru Rinpoche, si pudiésemos pasar la mano por dentro del cuerpo de él. Esto significa que las negatividades pueden venir pero ellas no nos afectan. Esto es una mezcla de méritos relativos con méritos de sabiduría (absolutos)”.
Traducción: Paquita Gaete
Revisión: Sergio Neveu
Enlace original: http://www.cebb.org.br/nao-e-o-que-o-outro-seja-irritante-eu-e-que-me-irrito/